Para reinventar un terreno hace falta compromiso y visión. En el caso de Kronos Homes, esta firma ha bordado ambos ingredientes en el sector inmobiliario con la filosofía #puredesign que su equipo y Saïd Hejal (CEO de Kronos Real Estate Group) han seguido desde hace ocho años, cuando la marca nació, mimando la arquitectura tanto en continente como en contenido. Cosa apreciable en proyectos que la firma ha desarrollado hasta el momento, siempre de la mano de grandes nombres como el del estudio catalán RCR Arquitectes, ganador del premio Pritzker 2017 y autor de un complejo de villas privadas, apartamentos y hoteles cinco estrellas que, bajo el nombre de Palmares Ocean Living & Golf, se asienta en la costa portuguesa del Algarve para experimentarla desde el respeto.
Algo similar es lo que ha hecho Kronos Homes en el último proyecto firmado por Ricardo Bofill antes de fallecer, Brava se llama, en el que se ha actualizado la vivienda clásica mediterránea frente al mar. Lo hace en la catalana Platja d’Aro con orígenes que se remontan a la época romana, en la Costa Brava, y con una estructura de apartamentos cuya fachada viene con líneas depuradas y en color blanco y verde para no afectar al entorno, puesto que está rodeado de la pineda de la Vall d’ Aro, un escenario protegido por la Sierra de Cadiretes y el macizo de Gavarnes. En esa integración, además, aquí se ha contemplado el poder vivir el paisaje de forma exclusiva, en viviendas de uno, dos o tres dormitorios con grandes ventanales que dejan pasar la luz tan característica de la zona, dando paso a las terrazas generosas desde las que se observa el alrededor. También sus zonas comunes se abren al aire libre, tanto los jardines del proyecto como la piscina que se extiende a lo largo del terreno, de nuevo, de una manera magistralmente silenciosa.

Espacios amplios (con los que relajarse con vistas al mar) es la propuesta de Ricardo Bofill para Kronos Homes.
El complejo diseñado por Bofill se suma a sus proyectos residenciales, entre los que destaca la Muralla Roja en Calpe, Alicante, o el Walden a las afueras de Barcelona.

Brava incluye jardines y una gran piscina a pie de playa.


Algunos de los apartamentos en la última planta también presentan su propia piscina.
En primera línea de playa figura a su vez el proyecto que ha resuelto Rafael de La-Hoz para la marca inmobiliaria en Málaga, en concreto en el litoral de Estepona donde igualmente reinan las viviendas de un blanco impoluto (por la tradición náutica de la zona), que es el color con el que se alza este oasis residencial titulado The Edge, un edificio de formas fluidas y orgánicas similares a los trazos del viento sobre las dunas, el perfil de la costa o el contorno de las olas que casi llegan a los jardines frontales del proyecto, porque no hay barreras entre estas zonas verdes y la playa. Tal maravilla visual, una proeza arquitectónica, es la que se puede ver desde las terrazas de las que disponen las viviendas, todas de tres y cuatro dormitorios, cuyo interior se ha trazado con materiales nobles y piezas de diseño para vivirlas al máximo mientras uno no esté en el spa y en el gimnasio del complejo, o en la piscina cubierta, o trabajando de lunes a viernes en el espacio de coworking que allí mismo hay dotado de cocina.

Tanto la forma como el color imperante en The Edge copian la arquitectura y tradiciones de la zona.
En el proyecto, el césped kilométrico se extiende casi hasta la arena de la playa de Estepona.

Alrededor del silencio y el respeto a lo local gira la edificación para Kronos Homes de Eduardo Souto de Moura, otro premio Pritzker, situada en la emblemática y tranquila avenida Joao XXI de Lisboa, muy cerca del centro junto a edificios de estética art déco, numerosos parques y sitios estrella como el del Museo de Colección Moderna Calouste Gulbenkian, el cual se asienta en la ciudad mediante una estructura de hormigón igual que el proyecto de Souto ya construido a partir de una sobria retícula de este material brutalista. Viendo el edificio de la firma ahora, posiblemente pasará a ser un icono de la arquitectura de hoy gracias a las aperturas y estancias acristaladas de sus apartamentos, la sostenibilidad de vida que proponen los interiores, los revestimientos dorados de la fachada y su línea quebrada, guiño estético de este edificio titulado The One que, pese a su ubicación urbana, ofrece la tranquilidad de una zona residencial a las afueras así como una gran variedad de servicios para disfrutarlos en familia o junto a los vecinos.

Así es la fachada del proyecto The One.
Souto de Moura ha primado el confort en sus viviendas de Lisboa para Kronos Homes.

Lo que en cambio propone Onix, el proyecto de Kronos Homes que muy pronto verá la luz con un diseño de Clavel Arquitectos, es mudarse a la Finca Las Marías en Torrelodones, Madrid, en una de las casas pareadas pero independientes que allí habrá con jardín privado. Todas acompañadas de arcos y pérgolas que permiten vivir conectados al aire libre, aparte de disfrutar de espacios verdes comunitarios que, como era de esperar en la marca, se funden una vez más en el entorno circundante casi como si siempre hubieran estado ahí.

Las unifamiliares de Onix contemplan sus propios patios.