Una obra maestra del diseño
Bina, graduada de la École National Supérieure d’Architecture de Paris La Villette, tiene más de 15 años de experiencia en el sector. Su estilo se caracteriza por ser multidisciplinario y multicultural, ya que su familia procede de Suecia y Túnez y durante gran parte de su infancia vivió en Israel. Ella entremezcla el arte, el diseño y la arquitectura para transformar conceptos en objetos y espacios. No obstante, según reconoce, sus grandes amores son las lámparas y los sofás. Lo cual se percibe nada más ver el escultórico Perle, la nueva colaboración exclusiva que ha firmado de la mano del equipo de Roche Bobois.
Se trata de un mueble cómodo y de estética elegante que se caracteriza por sus ángulos suavemente curvados y su original respaldo que parece estar entrelazado. Perle se presenta en dos versiones, sofá y meridienne. “El respaldo y los reposabrazos se funden formando brazos envolventes que invitan al usuario a sentarse entre sus formas. La curiosa hendidura asimétrica transmite una firma gráfica distintiva a la colección y da sensación de movimiento a estos cómodos asientos”, explica la diseñadora.
“Me encantan las piezas que invitan a la participación del usuario, por eso me gustan los sofás o asientos que permiten adoptar distintas posturas. Aprecio cuando los diseños permiten a la gente moldear activamente su entorno. Estos sofás en concreto están revestidos en bouclé Orsetto, tienen inspiraciones del arte y la elegancia francesa y cuentan con una diversidad de tonalidades que se adaptan a cualquier tipo de hogar y ambiente. Los colores van desde tonos suaves, terrosos y acogedores hasta más atrevidos como el verde lima”, describe Bina.
El savoir-faire de Bina Baitel
Bina Baitel es en sí misma una artista multidisciplinar. “En 1995, cuando tuve que elegir mi carrera universitaria, el diseño de muebles no estaba tan arraigado como ahora, así que estudié arquitectura. Sin embargo, mi naturaleza algo impaciente me llevó a darme cuenta de que los proyectos arquitectónicos a menudo tardaban mucho tiempo en materializarse, cosa que no ocurría en el campo del diseño”, recuerda. “En 2007 di un paso valiente en ese mundo participando en un concurso. Tenía que proyectar una lámpara y acabé ganando. A partir de ese momento empecé a diseñar muebles y objetos”.
La multipremiada diseñadora, que lleva colaborando muchos años con Roche Bobois, también presenta su colección personal Unusual Objects la cual se arraiga en el trabajo de decoración que hizo para el castillo de Tremblay en Normandía. La línea (que incluye sillones, consolas, lámparas y espejos) la presentó en septiembre durante la pasada Semana del Diseño de París. “Todas las piezas que hago son coleccionables y se encuentran en la frontera entre el arte y el diseño”, concluye ella, opinando lo siguiente: “Además, si te fijas en cada uno de mis productos, todos narran una historia a través del equilibrio entre la innovación y el savoir-faire tradicional”.