Zona de estar con suelo de microcemento, cortinas de Kvadrat y muebles por Masquespacio. Repartidos por la estancia, jarrones Cono del estudio y en la pared, obra en 3D de Mas Creations. Sobre el taburete, vela de Loewe.
Nuevo al estilo de siempre
Para encontrar el tesoro del dúo Masquespacio hay que acercarse a la huerta de Valencia, rodeada de cultivos, saliendo unos minutos de la ciudad. Ahora bien, la recompensa no contiene monedas de oro, sino otras de colores, y con formas triangulares, cuadradas, circulares y semiesféricas. La casa es una antigua alquería de campo de principios del siglo XX, llena de detalles auténticos como los suelos hidráulicos o las escayolas que la pareja ha recuperado respetuosamente.
También se ha preservado el patio central, igual que muchísimos otros detalles que ahora se conjugan con algunas de las creaciones de la pareja que guardan con más cariño, pero sin epatar a la arquitectura original. “Fue una promesa que les hicimos a las antiguas dueñas”, recuerdan. Ana concluye, sonriente: “Lo más bonito es que, aunque la casa la hayamos hecho muy propia, la intervención mantiene la alquería en su esencia, añadiendo nuestro universo de color”.