
El restaurante bistró de Camilo Sighinolfi aparece gobernado por un mural de John Geoffrey Sánchez.
Detalles del interiorismo de la planta cero, con la barra presidencial al fondo.


El azul de los bancos es uno de los elementos que construye la esencia tropical de Odiseo.
Otro elemento llamativo dentro del recorrido visual del proyecto es la barra del bar, según el interiorista: “Aquí teníamos una altura tan imponente que hicimos una estructura en bronce de piso a techo para poder surtirla de botellas, cristal y elementos decorativosˮ. Las cabinas privadas con sofás abullonados y tapizados en cuero azul turquesa y mesas en mármol son también otro segmento de este restaurante bistró que llama la atención.
Para terminar y romper un poco con la tonalidad del lugar, Sighinolfi quiso contrastar los materiales frescos y cálidos de la madera y la losa hidráulica con un toque de brillo. Y así lo hizo al incluir poliuretano high gloss en las puertas de los baños y la cocina. Estas, además de abrirse a otros ambientes, al incluir pequeñas ventanas tipo escotilla le hacen un guiño al concepto de un barco y a la idea de este viaje eterno que inmortalizó el icónico personaje de la literatura griega, de quien el proyecto lleva su nombre.

La planta cero se construye contraponiendo hidráulicos y madera, de la mano de una sucesión de mesas de mármol.
La barra del restaurante bistró viene estructurada en bronce para abrazar su oferta en licorería.


Igual que la de los baños, la puerta de la cocina se ha confeccionado con poliuterano brillante y una ventana de ojo de buey.

Mientras se come o se cena, el mural en formato XXL de Geoffrey da la sensación de estar metido dentro de una selva.